Socialistas de todos los partidos

Blog inspirado en el libro "Camino de servidumbre", que Hayek dedicó a los socialistas de todos los partidos. Socialismo entendido como colectivismo, como sumisión del individuo al grupo, en aras de hermosos ideales que no sólo en su sueño producen monstruos.

miércoles, julio 26, 2006

Maniqueísmo 2: la salvación de las almas

Como decíamos ayer, los maniqueos tenían una cosmogonía distinta a la cristiana: el Dios de la Luz había creado el mundo obligado por un ataque previo del Dios de las Tinieblas. Pero es respecto a la creación humana y la posterior lucha entre el bien y el mal por nuestras almas, es donde el maniqueísmo era no ya distinto, sino totalmente opuesto a la doctrina de la Iglesia. De hecho, para algunos maniqueos el Dios del antiguo testamento no era el Dios de la luz, sino el de las Tinieblas, y era necesario leer esa parte de la Biblia como una especie de negativo de la verdadera foto.

No fue Dios sino Satanás el que creó al ser humano, para evitar que la Luz que había quedado atada a la materia pudiera escapar de vuelta a su hogar. Y nos creó a imagen y semejanza (incompleta y desfigurada, por ser una creación del mal) de una de las emanaciones del Dios de la luz, pero con un alma mezclada con la materia, y por tanto con el mal.

Satanás (Jehová) no quería que el ser humano despertara, por eso le prohibió comer del árbol de la ciencia del Bien y del Mal, pero el Jesús luminoso (lo que el Antiguo Testamento desfiguraba mediante la historia de la serpiente) consiguió contactar con Adán y le enseñó a distinguir el Bien del Mal, a amar la Luz y despreciar la materia y el contacto carnal. Pero Eva, ayudada por los demonios, consiguió hacer recaer a Adán. (La mujer como instrumento del mal contra el hombre, hay cosas que no cambian).

No es Dios, sino Satanás el que le encargó al ser humano lo de "creced y multiplicaos". Cuantos más seres humanos existieran más repartida estaría la Luz entre la materia, con lo que sería más difícil que pudiera reintegrarse a su verdadera naturaleza y estaría más atada a la materia, al mal.

El que el Dios del Antiguo Testamento fuera en realidad Satanás explicaría la crueldad, indecisiones y caprichos de los que está llena la actuación divina.

Los diferentes hombres santos y fundadores de religiones, como Moisés, Buda, Zoroastro, Jesús o Mani tenían una función fundamental en la salvación de las almas, al instruir, despertar y santificar a los hombres y enseñarnos a perder el aprecio por lo material.

Como consecuencia de todo esto, la moralidad predicada por los maniqueos era tremendamente ascética, haciendo hincapié en la castidad, el vegetarianismo y la vida contemplativa. Tal y como pasó en el cristianismo temprano, fue necesario que se condenara el suicidio, ya que numerosos creyentes tomaban esa vía rápida para separarse de este mundo material, de este valle de lágrimas, para llegar más rápido a la presencia de la deidad. Los maniqueos más elegidos conseguían salvar su alma al morir, mientras que las almas de los no perfectos sufrían sucesivas reencarnaciones, y las de los más pecadores iban directamente al Infierno.

Cuando ya apenas quedara Luz en la Tierra, llegaría el fin del mundo, en el que el fuego consumiría el mundo hasta que toda la Luz fuera liberada.

El enlace original da muchos más detalles, pero por último voy a contar cuál era el mecanismo mediante el cual creían los maniqueos que la luz contenida en las almas de los justos conseguía volver a su hogar original, la morada de la Luz, el Paraíso:

Ascendía por el pilar del amanecer hasta llegar a la Luna, que durante la mitad de su ciclo iba llenándose al acumular Luz, para después vaciarse enviándola al Sol. El Sol, a su vez, la mandaba a través de las 12 constelaciones del horóscopo hacia el hogar de la Luz. Todo el movimiento de las esferas estaba al servicio de la salvación de las almas.

Jugando a la ucronía, quién sabe si hoy día se podría usar la palabra Iglesia como sinónimo de falsedad, satanismo o relativismo. O si al contemplar la luna llena sonreiríamos pensando que está más cercana la victoria definitiva del bien sobre el mal.

sábado, julio 22, 2006

Maniqueísmo 1: la creación del mundo

Dicen que la Historia la escriben los vencedores. La Iglesia no atraviesa hoy sus mejores horas pero durante siglos ha sido una formidable competidora para las demás religiones, a las que consiguió fagocitar (culto a Mitra) o denigrar y de ahí el matiz negativo que tienen hoy día palabras como herejía, pagano, judiada, ladino, o maniqueo. Usamos maniqueísmo como sinónimo de simplismo o cerrazón, ignorando que el maniqueísmo fue una religión que durante dos siglos compitió seriamente con el cristianismo y que desarrolló un cuerpo doctrinal complejo y elaborado. Combinaba características del judeocristianismo, el budismo, el gnosticismo, las religiones iranias y la astrología.

Su fundador, el persa Manes o Mani, (210-276), anunció que era el Paráclito prometido en el Nuevo Testamento, el Último Profeta y el Sello de los Profetas, último de una serie de hombres enviados por Dios que incluía a Set, Noé, Abraham, Shem, Nikotheos, Henoc, Zoroastro, Hermes, Platón, Buda y Jesús. Es curioso que en el segundo libro de Henoc se afirme que las almas de los justos al morir se convierten en astros, lo que prefigura parte de las creencias maniqueas.

Para un cristiano de creencia o de cultura la doctrina maniquea es todo un desafío. Supongo que todos nos hemos preguntado alguna vez por qué Dios creó al hombre, por qué puso un árbol de la ciencia del bien y del mal en el Edén si el hombre no debía comer de él, y por qué no iba a querer Dios que el hombre discerniera el bien del mal. Por qué mandó a Jesús a morir. Por qué existe el mal y cómo que Dios lo permite. Pues bien, las respuestas maniqueas a estas preguntas son una alternativa interesante a las cristianas que todos conocemos. Para todos los interesados en religión, filosofía o mitología:

El maniqueísmo es dualista; cree en la existencia de dos potencias divinas, una de la Luz (Ormuz) y otra de las tinieblas (Ahrimán). El mal no es simplemente la ausencia de bien, sino que posee existencia propia. En cambio, el cristianismo condena el dualismo y mantiene que existe un sólo Dios, mientras que el mal no proviene de una divinidad comparable en poder con Dios, sino de la combinación de un ángel caído y del libre albedrío humano. Esta solución es bastante chapucera, y no da respuesta a la pregunta de por qué un Dios omnisciente y todopoderoso creó a los ángeles y a los humanos, aún sabiendo que así daba pie al nacimiento del mal.

En el principio existían dos reinos, el de la Luz y el de las Tinieblas, ambos perfectamente separados, ambos sin origen, siendo ellos mismos los orígenes. El reino de la Luz está presidido por el Padre de la grandeza, y a ese reino pertenecen "los cinco Sh´kinas: Inteligencia, Conocimiento, Pensamiento, Deliberación, Resolución. El principio maligno es llamado "Rey de las Tinieblas" y mora en su tierra de Tinieblas rodeado por sus cinco Eones (o "Mundos"), el Eón de Humo, de Fuego, de Viento, de Agua y de Tinieblas." Para el maniqueísmo la materia pertenece a las tinieblas, al mal, mientras que los dones positivos de tipo espiritual son inmateriales y pertenecen a la luz, al bien.

El Dios cristiano, también eterno y él mismo el origen, decidió un buen día crear la materia, sin que tengamos muy claro por qué. En cambio, la Luz "lejos de considerar la existencia de las Tinieblas como un desafío, no desea nada sino la separación y no tiende, ni benevolente ni ambiciosamente, a iluminar a su opuesto. Ya que las Tinieblas son lo que están destinadas a ser, y abandonada a su propia suerte, ella realiza su naturaleza de la misma forma que la Luz realiza la suya." La Luz es autosuficiente, desea brillar sólo para sí misma y no también para lo que carece de ella, y dejada a su propio consejo permanecería sin tentarse a lo largo de la eternidad. No es pues la Luz la que inicia la mezcla del bien y el mal, ya que ella es inmutable y perfecta, no necesita ni desea nada externo a sí misma. "Ahora, si la separación dualista es el estado normal y satisfactorio de la Luz, entonces en lugar de una caída desde arriba, debe ser un alzamiento desde abajo el que ponga el destino en movimiento. El comienzo, entonces, yace en la profundidad y no en la altura". Es el mal el que provoca la creación del mundo material, el que causa el confinamiento de la Luz en las Tinieblas.

"¿Qué motivó a las Tinieblas para alzarse y pelear contra la Luz? En términos de ocasión externa: la percepción de la Luz, que hasta el momento había sido desconocida para ella. Para alcanzar tal percepción, las Tinieblas tenían que llegar primero a sus propios límites exteriores; y hacia ellos fue empujada en algún momento durante el curso de la guerra interna en la que las pasiones destructivas de sus miembros estaban continuamente trabadas. Ya que la naturaleza de las Tinieblas es odio y contienda, y debe satisfacer esta naturaleza contra ella misma hasta que el encuentro con la Luz presente un objeto mejor y externo."

"Durante el transcurso de la guerra ellos vinieron, algunos perseguidos y otros persiguiendo, hasta los límites de la Luz, y cuando ellos contemplaron la Luz -una visión gloriosa y maravillosa, muy superior a la suya- les complació y se maravillaron ante ella; y se reunieron "toda la Materia de las Tinieblas" y deliberaron cómo podían mezclarse con la Luz. Pero por el desorden de sus mentes, no se dieron cuenta que el fuerte y poderoso Dios moraba allí. Y ellos se esforzaron en elevarse hacia las alturas, porque nunca habían recibido un conocimiento del Bien y de la Divinidad. Así, sin entender, ellos lanzaron una insensata mirada de codicia por el espectáculo de esos benditos mundos, y pensaron que todo podría llegar a ser de ellos. Y llevados por la pasión dentro de suyo, ahora deseaban con todas sus fuerzas pelear contra ella para así atraerla hacia su poder y mezclar con la Luz sus propias Tinieblas."

"Dios no tenía nada maligno con que castigar a la Materia, ya que nada maligno hay en la casa de Dios. No tenía ni fuego que consume, con el cual lanzar truenos y rayos, tampoco agua sofocante con la cual enviar una inundación, ni hierro cortante o cualquier otra arma; ya que todo en él es Luz y sustancia (lit. "lugar") noble, y él no podía dañar al Maligno." Por ello fue necesario crear una nueva hipóstasis divina enviada por Dios al encuentro con las fuerzas de las Tinieblas, proceso que se repitió posteriormente en varias ocasiones, cada vez con distintos nombres: alma, hombre primigenio, amigo de la luz, gran arquitecto, espíritu viviente, etc.

"El archidemonio tomó a sus cinco elementos -el humo, el fuego que consume, las tinieblas, el viento abrasador, y la niebla- y se armó con ellos, y fue al encuentro del Hombre Primigenio. Después de pelear durante mucho tiempo entre ellos, el Archidemonio subyugó al Hombre Primigenio. Acto seguido el Hombre Primigenio se dio a él mismo y a sus cinco Hijos como alimento para los cinco Hijos de las Tinieblas, como un hombre que tiene un enemigo mezcla un veneno letal en una torta y se la entrega. El Archidemonio devoró parte de su luz [i.e.., sus cinco hijos, su armadura o escolta, llamada Alma] y al mismo tiempo lo rodeó con sus elementos y los de su clase. Cuando hubieron sido devorados por los Hijos de las Tinieblas, los cinco dioses luminosos fueron privados del entendimiento, y por el veneno de los Hijos de las Tinieblas, se volvieron como un hombre que fue mordido por un perro rabioso o una serpiente. Y las cinco partes de la Luz llegaron a estar mezcladas con las cinco partes de las Tinieblas. De los cinco elementos, el Dios de las Tinieblas tomó como botín al Alma noble y la encadenó en la impureza. Ya que él la había dejado ciega y sorda, y estaba inconsciente y confundida, tanto que al principio no conocía su propio origen."

"Pero el devorar tiene también un efecto en el que devora. No sólo desvía a las Tinieblas de su objetivo original, el mundo de la Luz, sino que además dentro de ella, la sustancia devorada actúa como un calmante, y, ya sea porque su deseo ha sido satisfecho o embotado, se ha detenido por este medio el ataque. La rendición del Alma a las Tinieblas no sólo aparta la amenaza inmediata al mundo de la Luz sino que, al mismo tiempo, da los medios por los cuales, al final, las Tinieblas son conquistadas. El objetivo de corto plazo se expresa con la idea de la "tentación" y del "veneno calmante"; el objetivo de largo alcance de este ardid (ya que el sacrificio es eso, aun cuando la deidad fuera forzada a hacerlo) yace en la idea de que la eventual re-separación significa la "muerte" de las Tinieblas, i.e., su reducción final a la impotencia. Por la mezcla, sin embargo, el Alma quedó sujeta a las afecciones de la Materia y contra su verdadera naturaleza, fue degradada a compartir el mal".

El Dios de la luz creó y envió al Espíritu viviente a salvar al Hompre primigenio. El Espíritu viviente lo cogió de la mano derecha sacándolo del combate (este es el gesto que rememoraban los maniqueos al saludarse dándose la mano derecha). Pero una parte de la Luz que había sido hecha prisionera no pudo salvarse, al estar demasiado mezclada con las Tinieblas. Y entonces el Dios de la Luz se vió obligado a crear el mundo como método de salvación de los restos de Luz cautivos, para permitir su separación. Para los maniqueos, todo ser vivo tiene encerrada Luz dentro de su materia, aunque los seres humanos tenemos mucha más que los animales, y estos que los vegetales. La materia que conforma el mundo viene de la piel, huesos y carne de los espíritus tenebrosos (arcontes) que devoraron el Alma del Hombre primigenio, y se debilitaron al hacerlo. El mundo material es pues la encarnación literal del mal.

"Aquella parte de la Luz devorada que está menos manchada fue purificada hasta hacerse "luz" en el sentido físico, y de las partes más puras son formadas el sol y la luna -las dos "naves"- y del resto, las estrellas. Por lo tanto, las estrellas, con excepción de los planetas, que pertenecen a los arcontes, son "resabios del Alma". Pero con esta organización macrocósmica sólo una pequeña porción de Luz es salvada, "el resto está todavía aprisionada, oprimida y manchada"; y los seres celestiales lamentan esto".

En resumen: las Tinieblas (el mal) y la Luz (el bien) existían desde siempre. Las Tinieblas envidiaron a la Luz, y lucharon contra ella, tomando parte prisionera. El Dios de la Luz, para salvar a la Luz cautiva y traerla de nuevo a casa, se vió obligado a crear el mundo material usando los cuerpos de los arcontes malignos que aprisionaban a la Luz en su interior. Pero la Luz (el alma, el espíritu) había quedado inconsciente y confusa tras la lucha y su mezcla con las Tinieblas (la materia), y no recordaba su origen ni su verdadera naturaleza. Dios tuvo pues que mandar un emisario a la Tierra para despertar a nuestros espíritus. ¿Os imagináis a quién envió?.

Pero la entrada se hace ya demasiado larga, continuaré mañana.

jueves, julio 20, 2006

Eisenstein y el protagonismo colectivo de las masas

¿Qué es un colectivo humano?. A esta pregunta se le puede dar una respuesta liberal o una respuesta colectivista. La liberal es: un conjunto de individuos, una enumeración, un listado de personas, junto con las instituciones que estos individuos producen y mantienen en funcionamiento. La colectivista es: una realidad distinta del mero conjunto de individuos, superior a ellos, con sus propios deseos, voluntad, necesidades, de naturaleza preexistente o de existencia necesaria debido a las inexorables reglas de la Historia. Para los liberales los colectivos humanos son importantes pero contingentes y susceptibles de nacimiento y transformación, puesto que el colectivo no tiene naturaleza propia, sino sólo la que crean, mantienen y modifican los individuos que lo componen. Son los individuos los que mediante sus actividades e interrelaciones forman el colectivo. Para los colectivistas, en cambio, es el colectivo el que forma a los individuos, el que les da una razón de ser y una esencia. Para un colectivista, alguien que no ama "lo suyo" es un individuo huérfano, incompleto, sospechoso, que no tiene por qué disfrutar de los mismos "derechos" que los demás puesto que no es un miembro del "espíritu" comunitario.

Del liberalismo surge la nación política, concebida como el conjunto de ciudadanos que residen en un territorio, de los que emana la soberanía de la nación, y que son libres e iguales ante la ley. De aquí se derivan las libertades del individuo frente al Estado (lo que es lo mismo que decir frente al colectivo). Se instauran toda una serie de controles y equilibrios para intentar evitar que el poder pueda volverse despótico. No se impone coactivamente ningún objetivo colectivo ni ninguna moral, únicamente el respeto a la vida, libertad y propiedad de cada individuo, a fin de que cada individuo pueda decidir qué objetivos perseguir y mediante qué métodos.Del colectivismo surgen las naciones culturales, las naciones étnicas y las naciones socialistas. De aquí se derivan los derechos colectivos y los derechos sociales. Es decir, los individuos no le dicen al colectivo que no se meta en su vida más de lo imprescindible para el funcionamiento de las instituciones y de la convivencia, sino que espera recibir del colectivo una serie de prestaciones sin necesidad de contrapartida alguna. Obviamente, los "derechos" de unos individuos conlleva deberes para otros, con tal de que en la sociedad sólo se hable el idioma ancestral, brille la pureza étnica, se respeten las tradiciones milenarias o se consiga la igualdad económica. El colectivo fija determinadas concepciones morales, y los controles y equilibrios del poder se debilitan o eliminan. La voz del líder es la que habla por la nación, la que interpreta sus deseos, la que la lleva a completar su misión histórica o a recuperar su más pura esencia. No hay espacio para la discrepancia, para el individualismo, para el de otra raza, el que quiere hablar en otro idioma, el que no desea vivir de acuerdo a las tradiciones del colectivo, o para los "burgueses".

(Obviamente, esta es una generalización. Entre ambos extremos hay muchas combinaciones y de hecho la España actual tiene muchas características socialistas, aunque haya quien piense que vivimos en el colmo del "neo"liberalismo. Y muchas personas que se consideran a sí mismas socialistas defienden los fundamentos de la democracia liberal.)

Pero desgraciadamente no existen palabras distintas para esas dos realidades. Para ambas tenemos "colectivo", "nación", "república", etc. Si se quiere concretar más hay que adjetivizar: nación de ciudadanos, nación política, nación cultural, nación étnica, república de trabajadores, etc. Por tanto, muchas conversaciones se convierten en diálogos de sordos, al estar cada interlocutor usando una misma palabra para dos conceptos distintos aunque relacionados.

La ventaja de la palabra "masa" es que no deja lugar a dudas: en una masa cada uno de los individuos es insignificante. "Serguei M. Eisenstein (1.898-1.948) expresa su adhesión a la causa revolucionaria proclamando su interés por el protagonismo colectivo de las masas. Pero tanto en La Huelga como en El acorazado Potemkin, como en Octubre las masas padecen, pero no protagonizan nada; más bien lo que hacen es participar de un vértigo cuyo sentido se les escapa. En el cine de Eisenstein no hay lugar para personajes, es decir, personas dotadas de discurso. De los individuos interesa a Eisenstein sus experiencias, pero ni su discurso ni su conciencia."

Es difícil encontrar una analogía más certera entre forma artística y fondo ideológico. Eso es el comunismo: un sistema que pensando en la masa elimina el discurso y la conciencia de cada individuo. Como en el cine de Eisenstein, en un sistema comunista no somos Fulanito González, sino la madre 1 o la madre 2, el obrero o el oficial. Nos desindividualizamos y como consecuencia nos deshumanizamos.

Sin embargo en las películas supuestamente protagonizadas por las masas el verdadero protagonista es el mismo Eisenstein. Es su marcada individualidad, la originalidad de la concepción, la fuerza que le imprime a los planos, los encuadros, la iluminación, el montaje, lo que hace que sus películas puedan seguir viéndose con interés. En todo momento podemos imaginarnos su cerebro en acción, sus manos en la sala de montaje cortando y volviendo a montar hasta obtener el efecto exacto que estaba buscando. Pero un cine en el que no haya ningún protagonismo individual ni en el guión ni en la dirección ni en la fotografía ni en los actores es un pestiño imposible de soportar durante 90 minutos. Por el contrario, los telefilmes de sobremesa podemos verlos aunque carezcan de valor artístico, simplemente porque nos cuentan una historia individual, nos ofrecen un personaje con el que identificarnos o al que odiar.

Entre la materia y el genio, la URSS del materialismo dialéctico no podía más que elegir la materia. Estaba en su naturaleza, como lo está en la del escorpión matar a la rana que lo salvaría de ahogarse. El comunismo fue un gigantesco experimento social de protagonismo de la masa, de lo comunitario, frente al individuo. Y acallando al individuo cegó la fuente de la riqueza, puesto que a pesar de la mitología y el lenguaje del colectivismo, no existe un cerebro colectivo ni unas manos colectivas.

Al prohibir que los individuos pudieran tomar iniciativas económicas, acumular riqueza en la medida en que contribuyeran a su creación, ni tener medios para planificar libremente sus vidas, la URSS propició su colapso económico. La URSS era rica en recursos naturales, territorio y población. La Alemania del Este partía de la misma situación que la occidental. Sin embargo, para cuando se produjo la reunificación las diferencias en el nivel de vida y el progreso material eran tales que aún hoy, millones de euros de inversión después, se siguen notando.

Pero no sólo de pan vive el hombre. El comunismo restringe toda discrepancia, toda heterogeneidad, toda desviación individualista de la norma, toda crítica, la libertad de expresión, de circulación, de residencia, de asociación. No existe ni existirá una democracia digna de tal nombre donde gobierne el comunismo, aunque obviamente el comunismo dedicó toda su propaganda a adueñarse también de la palabra democracia: república democrática de Alemania, democracia popular. Nada tenían que ver con una democracia liberal.

Impidiendo la libertad de sus habitantes, la URSS causó un derrumbe de la ética, una invasión del gris, del cemento, del realismo socialista, un país mediocre y asustado en el que todos temían destacar o ser delatados. El comunismo con sus gulags y sus Laogai (de los que habla aquí Miguel Cancio) causó y sigue causando muchos más muertos que los campos de concentración nazis (otros socialistas), pero son mucho menos conocidos debido a la exitosa propaganda comunista y a la colaboración de muchos intelectuales europeos de izquierdas que le siguieron y siguen el juego.

Muchos artistas que en los inicios de la URSS se creyeron las bonitas palabras comunistas y apoyaron la revolución, cambiaron más tarde de idea o fueron "depurados" o censurados. El mismo Eisenstein en sus últimos años de vida sufrió la censura stalinista. El momento de efervescencia, de euforia revolucionaria, duró poco, y después el poco arte valioso de la URSS lo produjeron los descontentos, los resistentes. La capa de arte que envolvía al cine de Eisenstein desapareció, y lo único que quedó fue la propaganda desnuda, repetitiva y omnipresente.

Si no se permite que los individuos creen, no existe un "colectivo" que los reemplace. Ninguna de las creaciones de las que los colectivistas se sienten tan orgullosos las creó el espíritu colectivo, sino individuos concretos: ni la sardana, ni el gazpacho, ni las sevillanas, ni El Quijote, ni el fado son creaciones colectivas. El gazpacho no lo crearon millones de andaluces reunidos con el objetivo de crear un hecho culinario diferencial. El gazpacho lo creó una persona (puede que ni siquiera de origen andaluz, no lo podemos saber) residente en Andalucía. Obviamente, usó los ingredientes que tenía a mano. Y dado lo difíciles y poco frecuentes que eran los desplazamientos, el gazpacho se expandió relativamente poco. Pero no fue creado por el espíritu andaluz ni está unido a Andalucía por ningún vínculo mágico. De igual modo el cine de Eisenstein no lo creó la URSS ni la masa ni el proletariado. Lo creó un genio, un individuo.

Más sobre cine y política en Cine político hispano. Más sobre Eisenstein aquí.

martes, julio 18, 2006

Carmelo Gómez acerca de El perro del hortelano


"La ausencia de Pilar Miró en el cine español es tan grave como la política de cine que tenemos en este momento......

Rodamos toda la primera parte en el palacio de Sintra.... Luego se acabó el dinero.... Pilar nos propuso quedarnos con la película pero nadie creía, ni nosotros mismos, que eso iba a ser lo que fue. Y ¿cómo iba yo a hipotecar una casa o a hipotecar mis ahorros, los 4 ahorros que yo tenía, para sacar adelante El Perro del hortelano?. Yo qué sé, en fin...Una cosa es que te contraten y que creas en el proyecto, y otra cosa es que te embargues. Y tuvimos que dejarlo durante una temporada y pensamos que no volveríamos a recuperar jamás ese proyecto y que se moría ahí, después de que el material que habíamos visto estaba muy bien y estábamos todos muy contentos.....No sé por qué extraño milagro aparece dinero de no se sabe dónde para continuar con lo que quedaba y se nos prometió que a lo mejor se nos pagaba algún día si lo terminábamos, y decidimos todos terminarla pasara lo que pasara. Fue un gran calvario que al final acabó siendo una gran película."

Esta entrevista a Carmelo Gómez aparece en la colección Un país de cine 2 que sacó el diario El País en 2.004.

Me parecen unas declaraciones muy significativas. En primer lugar se queja de la actual política de cine. Traduciendo al español supongo que le parecen pocas las subvenciones que se le entregan a la gente del cine. Parece ser que la gente del cine tiene "derecho" a recibir dinero para hacer películas y si no lo consiguen haciendo películas que la gente quiera pagar por ver, lo quieren conseguir de cualquier modo pagadas con nuestros impuestos. Seguramente es por falta de sentimiento nacional que la gente prefiera ver películas extranjeras que españolas, no porque apenas se hagan películas españolas interesantes. Significativo resulta que para según qué cosas la izquierda apele al sentimiento nacionalista español. A "lo nuestro". Pero aplicado a cualquier otro tema el razonamiento quedaría absurdo: no soy un buen cocinero y no consigo que me contrate nadie, así que tengo derecho a que me paguen un sueldo mediante los impuestos de todos para tener abierto un restaurante en el que a casi nadie le apetece comer. Y la culpa es de la gente, que prefiere ir a restaurantes chinos o mejicanos. Qué poco patriotismo. A pagar más impuestos, que es lo que tenéis que hacer.

Pero lo que más me llama la atención es la parte en la que habla de los problemas de financiación que tuvo El perro del hortelano. De cómo estuvo a un pelo de no poder terminarse por falta de financiación. De cómo Pilar Miró le propuso al equipo que financiaran el resto del rodaje ellos mismos, pasando a ser los dueños del proyecto. Y de cómo, a pesar de haber visto el material ya rodado, y "creer en la película", el equipo no quiso arriesgar su propio dinero. Es decir, todos los españoles tenemos que pagar mediante impustos proyectos que no tienen por qué interesarnos, sin poder decidir y sin sacar nada a cambio. Pero esas mismas personas que piden más subvenciones son incapaces de arriegar su propio dinero para su propio proyecto, del que además podrían haber sacado mucho dinero. No, ellos van a la cómodo y a lo seguro. A cobrar su sueldo vaya como vaya la película en taquilla. A ser trabajadores asalariados en vez de empresarios. Y si ese sueldo no se lo paga la taquilla que se lo paguen los subvenciones. Pero nada de arriesgar los "cuatro ahorros que pudieran tener" (no sé cuánto dinero pudiera tener Carmelo Gómez ahorrado, pero me resulta curioso que hiciera ese aparte para dejar claro que él no es un burgués forrado de dinero, porque para cierta izquierda está mal visto llegar a tener dinero, aunque no creo que Victor Manuel, que es comunista, haya regalado su fortuna a los proletarios de barriadas humildes).

Así que de haber sido por ellos, a quienes se les llena la boca de loas al cine español, la película se habría quedado a medio hacer. Pero llegó un capitalista y aportó el dinero, arriesgó los millones necesarios para terminar una película en la que ni siquiera los actores creían. Arriesgó un dinero que fue el que permitió hacer la película, un dinero que había ahorrado creando riqueza, y con el que le pagó el sueldo al señor Gómez. Gracias a ese capitalista pudimos ver El perro del hortelano.

Pero que quede claro que está mal ser un capitalista que permite realizar proyectos, que crea trabajo y que busca rendimiento a sus inversiones. Lo que está bien es ser un artista concienciado y subvencionado, de esos que aman mucho el cine mientras lo paguen otros. De esos que dejan claro que ellos sólo tienen cuatro ahorros. De los que no manchan al arte mezclándolo con el vil dinero. Sobre todo cuando se trata de su propio dinero.

miércoles, julio 12, 2006

Euskadi, un país increíble

¡Pero qué arte que tienen escogiendo eslóganes!. Lo de increíble no voy a negarlo, están pasando cosas en Euskadi que nos las cuentan hace unos años y no les damos crédito. Sin embargo lo de país tiene su enjundia. De acuerdo, a Euskadi se le llama País Vasco, pero para la campaña podrían haber usado cualquier otro término: lugar, sitio, región, comunidad, etc. Todos sabemos que el uso habitual de país es como sinónimo de nación. Por eso usamos país para Italia, Portugal y EEUU y no para Sicilia, el Algarve o Iowa. ¿Alguien se imagina a los encargados de turismo de la Generalitat catalana tratando de potenciar el turismo del "Estado español" con anuncios de "Catalunya, una nación increíble"?.

Pero usando "país" se nota menos, porque es la versión blanda de nación. Por eso Zapatero el vaporoso usa siempre país para referirse a España. ¿O será para que no se le enfaden los socios parlamentarios?. No seáis malpensados, es simplemente que Zapatero es una persona reflexiva para quien el concepto "nación" es discutido y discutible, a no ser que la mayoría de los parlamentarios catalanes vote que Cataluña es una nación, en cuyo caso eso para Zapatero va a misa o cuando menos a un preámbulo. Se ve que los españoles nunca votaron mayoritariamente a favor de ningún documento legal importante que definiera a España como nación. Ahora somos una nación de naciones o un país de países, que es como más postmoderno y vanguardista que ser una nación o un país a secas.

viernes, julio 07, 2006

Hacer falta

Por descansar un poco de tanta política. Capítulo segundo de la primera parte de El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha:

"Hechas, pues, estas prevenciones, no quiso aguardar más tiempo a poner en efecto su pensamiento, apretándole a ello la falta que él pensaba que hacía en el mundo su tardanza, según eran los agravios que pensaba desfacer, tuertos que enderezar, sinrazones que enmendar, y abusos que mejorar, y deudas que satisfacer."

Y es que, bien pensado, hacer falta = causar falta = causar imperfección, daño, menoscabo = provocar mal. Por contra, hoy en día usamos "hacer falta" como sinónimo de "ser necesario", y cualquiera de nosotros puesto a reescribir el Quijote (quién sabe si incluso el mismo Pierre Menard de haberse decidido por el capítulo segundo) se expresaría así:

"Hechas, pues, estas prevenciones, no quiso aguardar más tiempo a poner en efecto su pensamiento, apretándole a ello la falta que él pensaba que hacía en el mundo su presteza, según eran los agravios que pensaba desfacer, tuertos que enderezar, sinrazones que enmendar , y abusos que mejorar, y deudas que satisfacer".

Al igual que sucede con "nuevamente" o "de nuevo", en estos siglos la expresión "hacer falta" ha tomado un sentido totalmente opuesto al original y lógico, probablemente por confusión con la expresión "echar algo en falta". Y nos paramos tan poco a analizar y sentir las palabras que usamos que no nos damos cuenta (por lo menos yo) hasta que nos entra el gusanillo de leer clásicos.

Una última curiosidad: la tan famosa expresión "desfacer entuertos" no aparece en la lista de actividades a las que el Quijote pensaba dedicarse. Entuerto en un sinónimo de agravio (que son los que quería desfacer) pero con el matiz de desviación o torcimiento, y por eso Cervantes usó "enderezar entuertos". No obstante se le suele citar incorrectamente, no hay más que recurrir al Google:

desfacer entuertos: 21.200 resultados.
deshacer entuertos: 15.400 resultados.
enderezar entuertos: 12.500 resultados.

miércoles, julio 05, 2006

Neolengua v2.0

Siguiendo el esquema de la Neolengua v1.0, tendríamos que la Neolengua v2.0 la copia en lo que puede, y la adapta en lo que no.

Punto 1: tomar una determinada palabra de obvias e innegables connotaciones positivas, y adueñarse de ella. Ejemplos más corrientes: progreso, libertad, derechos, paz. Si un determinado partido o ideología política afirma que ella defiende la paz, el partido adversario puede recurrir a la propaganda contraria: no, señor, no son ustedes los que defienden la paz, sino que somos nosotros. Y así, en el reducido campo del punto 1, llegamos a esos momentos supremos de debate parlamentario que consisten en un repetitivo "yo más que usted, o usted menos que yo". "Yo quiero la paz, y usted me critica, ergo usted no quiere la paz". Como arma propagandística es de lo más zafio, pero si se repite lo bastante acaba calando en muchas personas. El punto 1 tiene un gran potencial en estos tiempos en los que en el telediario se emiten cortes de 20 segundos de las declaraciones de cada político, en los que la imagen predomina sobre la letra (en un slogan de manifestación cabe relativamente poco texto, así que un "No a la guerra" es perfecto), y muchos ciudadanos desisten de leer cualquier texto medianamente complejo o largo.

Punto 2: reducir drásticamente el vocabulario disponible para matizar o concretar conceptos, y para poder desarrollar un pensamiento crítico propio. Obviamente, tenemos la suerte (gracias a que las personas que nos precedieron valoraron la libertad lo bastante como para ceder cada uno un poco con tal de poder convivir todos) de vivir en un sistema no totalitario, sin censura y con libertad de expresión. Pero la Neolengua v2.0 hace lo que puede:

Los niveles de exigencia en la educación son cada vez menores, como lo son los temarios. Existe una proporción bastante grande de "analfabetos funcionales", perfecto caldo de cultivo para desarrollar el punto 1. Además, la educación no se limita a potenciar la capacidad crítica de cada alumno y suministrarle conocimientos para llegar a ser un ciudadano libre e informado, sino que tiene un gran componente ideológico, lo que a edades jóvenes marca bastante las posteriores ideas políticas. Un ejemplo de la ideología implícita en los temarios sería: los impuestos son buenos y quien no los paga gustoso es porque es un individualista egoísta antisocial. El comunismo fue una buena idea mal aplicada. Y no es sólo el temario en sí, sino también todo el ambiente educativo: la autoridad del profesor es un concepto cada vez más discutido, suspender a un alumno es malo porque puede causarle traumas, si un alumno suspende lo más probable es que la culpa sea del profesor, el ejercicio de la memoria es retrógrado, lo moderno es adecuarse al alumno, y conseguir que se divierta en clase. No hay alumnos mejores y alumnos peores, lo que hay es diversidad, que por cierto es un valor en sí misma.

Pero obviamente no basta con que la pedagogía posmoderna haya tomado la escuela, siempre queda la familia, internet, los libros, las personas con las que nos vamos cruzando, y sobre todo, queda la individualidad que vamos desarrollando junto a la personalidad. La Neolengua v2.0 tiene otra arma de lo más sutil: la corrección política.

Como todas las medias verdades, la corrección política es muy peligrosa. Consiste en un conjunto de reglas no escritas que limitan lo que se puede decir si se quiere ser considerado un ciudadano aceptable. En una serie de temas de los que simplemente no se habla. En una serie de "ideas" muy parecidas a los esloganes en su simplicidad y aparente autoevidencia. Es mucho más sencillo decir que todos tenemos derecho a una vivienda digna que explicar los posibles significados de la palabra derecho, meterse en consideraciones económicas de por qué es imposible que el Estado nos regale a todos una vivienda por el mero hecho de haber nacido, intentar explicar las razones históricas de que se haya llegado a poner por escrito semejante "derecho". Y, sobre todo, es muy difícil que alguien a quien se le ha educado en que tiene derecho a poder comprar una casa, porque así se lo han contado y porque así cree que se lo reconoce la Constitución, te dedique todo el tiempo que necesitarías para matizar eso del "derecho" a la vivienda digna. Y en unos pocos segundos, lo único que puedes llegar a decir es "es mentira que tengas ese derecho", lo que te convierte automáticamente en un ser inmoral, insolidario, sin principios. Más o menos como si dijeras "el Gran Hermano es nobueno". Y, desde luego, el artículo 47 de la Constitución colabora no poco a promover esta situación. Poner por escrito ese derecho a sabiendas de que no es un derecho positivo (que es como lo va a interpretar todo el mundo) y no explicar después en la escuela con mucho detalle su verdadero significado, lleva a lo que lleva. Aunque quizás es un efecto buscado. Ya se sabe que la Neolengua fomenta el colectivismo, y no hay nada que vuelva más colectivista a alguien que creer que tiene derecho a conseguirlo todo de la sociedad.

Conceptos mal vistos por la corrección política: mejor, peor, excelente, sobresaliente, mediocre, responsabilidad individual, esfuerzo, culpa individual, libertad económica, El Estado del bienestar es el bienestar del Estado, beneficios empresariales, USA, gobierno limitado, cristianismo (el islamismo en cambio es como muy chic, no me preguntéis por qué), individualismo, realidad, civilización occidental, soberanía nacional (sólo si se refiere a la de las democracias occidentales, sin embargo la del Irak de Saddam Hussein sí que era muy apreciada), autoridad, mérito, capitalismo, liberalismo, riqueza individual, deberes, desigualdad de resultados, etc. Defender este tipo de conceptos queda....sospechoso. Por supuesto, la lista puede ampliarse. ¿A alguien se le ocurren más?.

Así, en la Neolengua v2.0 el paso 2 consiste en promover la corrección política, el empobrecimiento del lenguaje y el desprecio por el conocimiento. Pero aún así la Neolengua de hoy día está en inferioridad de condiciones respecto a la de Orwell, ya que siguen existiendo los textos donde leer otras cosas, las palabras para matizar, la libertad de expresión, internet, etc. Así que la Neolengua v2.0 recurrió a un nuevo paso:

Punto 3: podría resumirse como la exaltación del pensamiento débil. Este punto conecta con otra de las grandes distopías literarias del siglo XX, Un mundo feliz. Pero con la paradoja de que la Neolengua v2.0 a la vez que potencia el conformismo, alaba de boquilla la rebeldía.

Ya que no se pueden eliminar las palabras, vamos a deconstruirlas, a relativizarlas, a negar que exista un mundo real aprehensible y comunicable. Institucionalicemos el nihilismo: ninguna opinión es mejor que otra, todo es relativo. Todo es posible y aceptable, dado que carecemos de principios, de valores y de argumentos racionales que nos guíen en la resolución de los problemas.

Ya que la lógica impediría creer al Gran Hermano cuando nos dijera que 2 más 2 son 5, condenemos la lógica por fría e insensible. Desprestigio del debate racional, en el que la realidad siempre tendrá las de ganar, y potenciación de los sentimientos. El que diga que si quieres poder disfrutar de riqueza lo justo es que primero la produzcas, es un ser insensible e inhumano, y por lo tanto miente. Me niego a seguir escuchándole, yo creo lo que quiero creer y punto. "Si quieres, puedes". (La Neolengua v2.0 lo aprovecha todo, incluso toma prestadas artes de la new age.)

Y si aún así quedan palabras de connotación positiva que la Neolengua no haya conseguido secuestrar del todo, y que no se hayan podido deconstruir o hacer irracionalmente rechazables, siempre quedan los adjetivos que desnaturalizan el sustantivo, las condicionales, las generalizaciones, los sí pero no, las cataratas de palabras, la retórica hueca, las expresiones ambiguas, las comparaciones simplistas, la vaporosidad del discurso, la huida de la claridad y de la concreción, las expresiones que suenan bien sin significar ni servir para nada, y a veces la pura y dura cursilería. Democracia avanzada, capitalismo sí pero sin pasarse, mi patria es la libertad (no corta el mar, sino vuela), libertad colectiva, redistribución de la riqueza, el trabajo asalariado es esclavitud, los empresarios son unos explotadores, ultraliberal, neoliberalismo (¿cómo es que nunca se dice neocomunismo ni neosocialismo ni neoprogresismo ni ultrasocialista?) derecho colectivo, no a la pobreza, anhelo infinito de paz (el excesivo énfasis de esta última expresión bien pudiera deberse a que la Neolengua empobrece, trivializa y relativiza tanto las palabras que sus practicantes habituales tienen que echarles mucha sal para que les sepan a algo).

Con todas estas armas, se ha llegado a una gran expansión de la Neolengua v2.0 y de sus objetivos ideológicos:

Colectivismo: función social de la propiedad, derechos sociales, justicia social, derechos colectivos, libertades colectivas, la culpa es de la sociedad, el terrorismo se debe a un mar de injusticia universal. Con todas estas expresiones, la responsabilidad individual se ve cada vez más diluída, y obviamente con ella va la libertad individual, ya que son dos caras de la misma moneda. En esto del colectivismo, la Neolengua v2.0 es fiel a su descripción literaria: no ve con buenos ojos la vidapropia (individualismo y excentricidad), pero lo tratará de disimular tanto como pueda: a las libertades individuales el comunismo las despreció llamándolas libertades burguesas y contraponiéndoles la verdadera libertad que supuestamente traería el comunismo. Claro, que eso sería detrás de un periodo indeterminado de dictadura del proletariado. Conseguir la libertad mediante la dictadura es una de esas contradicciones de las que está llena la Neolengua. Hoy día no se habla directamente de comunismo (hay que disimular) pero defender las libertades colectivas y los derechos colectivos lleva necesariamente a arrinconar los derechos y libertades individuales. Cuando el colectivo es el titular de los derechos, el individuo sólo tiene "derecho" a estar de acuerdo con el colectivo.

Dogmatismo: No a la guerra. ¿A cualquier guerra en cualquier circunstancia?. ¿Tampoco la guerra en defensa propia?. ¿Tampoco contra Hitler?. ¿Tampoco estuvo bien que el frente popular luchara durante más de tres años, en vez de rendirse de primera hora frente al alzamiento nacional?. Oye, se habría evitado la guerra civil y muchos muertos. Sí a la igualdad, Papeles para todos, etc. El problema de este tipo de afirmaciones dogmáticas es que suelen ser medias verdades de fuerte contenido sentimental, y obviamente luchar contra ellas no es tan sencillo como iniciarlas. No creo que nadie en sus cabales vaya a salir a la calle con carteles que pongan "sí a la guerra" o "no a la igualdad" o "ningún papel para nadie".

Relativismo: en España la igualdad legal de hombres y mujeres es un objetivo tan importante que por él vale la pena aprobar leyes que discriminan a los hombres frente a las mujeres (porcentaje mínimo de mujeres en los consejos de administración pero no de hombres, distintas penas por maltrato doméstico), sin embargo, la discriminación legal de las mujeres en los países que se rigen por la sharía es un hecho cultural muy respetable. En esta afirmación me da la impresión de que el relativismo encubre el cinismo propio del doblepensar y el negroblanco. Franco fue un tirano pero Castro un revolucionario. Todas las opiniones son igual de respetables. Cualquier cosa que alguien considere arte, es arte. Nadie es mejor que nadie. El relativismo suele ir unido al igualitarismo, y trata de eliminar la antigua admiración por la excelencia, el deseo de mejora personal, la consideración por la alta cultura. Obviamente, la igualdad así conseguida será una igualdad hacia abajo, pero todo sea por el colectivismo.

¿Cómo luchar contra la Neolengua v2.0?. Intentando matizar las afirmaciones dogmáticas, y concretar las relativistas, reduciendo al absurdo determinadas afirmaciones, usando la lógica, tratando de encontrar el núcleo entre tanta hojarasca retórica, reivindicando la racionalidad frente al sentimiento (al menos, en la esfera pública), el individuo frente al colectivo y la realidad frente al deseo.

Claro que no es fácil, pero frente a la Neolengua v1.0 lo tendríamos mucho peor.

Neolengua v1.0

En 1.984 de Orwell el dominio de la lengua era poder, y los gobernantes basaban gran parte de su tranquilidad en el control mental de los gobernados. Estaba en pleno desarrollo la Neolengua, que tal y como la describió Orwell a lo largo de la novela, y especialmente en su apéndice, se caracterizaba por:

punto 1: asociar todas las características positivas al Gran Hermano, grabándolas en la mente de los "ciudadanos" (más bien súbditos) mediante la educación, televisión, la radio, las reuniones comunales, la prensa, etcétera, que repetían machaconamente frases como Gran Hermano es bueno, Gran hermano es sabio, etc.

punto 2: reducir y empobrecer el vocabulario existente, de manera que para cada característica posible existiera sólo una palabra, sin ningún sinónimo y con un único antómino construido añadiéndole la partícula negativa no. Por ejemplo, "bueno" pasaba a monopolizar el campo semántico de compasivo, bondadoso, cordial, humanitario, benevolente, benigno, magnánimo, noble, etcétera. Y la única palabra existente en neolengua para expresar el campo semántico opuesto (malvado, malévolo, malo, etc) era "nobueno".

El objetivo era que para el año 2.050 la única lengua existente fuera la neolengua. Así, desde el nacimiento los niños serían adoctrinados en la bondad y sabiduría del Gran Hermano, y el lento proceso de duda, repensamiento, progresivo cuestionamiento de las ideas recibidas que suele caracterizar los cambios de ideas políticas sería prácticamente inviable. ¿Dónde iban a encontrarse textos contrarios a Gran Hermano en una sociedad tan totalitaria, y en qué idioma estarían escritos?. ¿De qué persona se iba a poder tomar ejemplo y recibir ideas distintas en una sociedad que no permitía ninguna discrepancia y que controlaba hasta el último movimiento de los habitantes?. ¿En qué idioma iba esa persona a ir sutilmente distanciándose y criticando al líder?.

Si a pesar del control asfixiante ejercido por el poder político sobre cada individuo una persona llegara a rebelarse mentalmente contra el Gran Hermano, carecería de palabras con que expresar o incluso pensar esa discrepancia. Y si tratara de comunicar esa discrepancia a otras personas para ir construyendo una red de resistentes, lo único que podría decirles sería "el Gran hermano es nobueno". Con lo cual se arriesgaba a ser tomado por loco, y a ser delatado inmediatamente a la policía de pensamiento acusado de crimenpensar (thoughtcrime).

Algunas de las principales palabras de la Neolengua eran:

Caracrimen (facecrime), rostro con una expresión impropia (como por ejemplo mostrarse incrédulo ante el anuncio de una victoria), lo cual está perseguido por la ley.

Doblepensar (doublethink), habilidad de mantener en la cabeza dos pensamientos contradictorios, uno realista y opuesto a la doctrina del Partido, y otro moldeado y de acuerdo con éste, de manera que la forma de actuar, el comportamiento y el propio pensamiento sea congruente con lo que dictamine el Partido, independientemente de las demás ideas que haya en la mente. Parafraseando al autor "incluso comprender la palabra doblepensar implicaba el uso del doblepensar". Por ejemplo, si el Partido dice que dos y dos son cinco, y en nuestra mente sabemos que en realidad deberían ser cuatro, la correcta aplicación del doblepensar consistiría en manifestar y comportarse como si fueran cinco, manteniendo internamente que el resultado es cuatro.

Negroblanco (blackwhite), aplicada a un enemigo se refiere a la costumbre de afirmar descaradamente que lo negro es blanco (contradiciendo la evidencia, que es aquello que el Partido ha prescrito), mientras que si se refiere a un miembro del Partido significa afirmar de buena gana que lo negro es blanco, cuando el Partido así lo indique.

Paracrimen (crimestop), facultad de interrumpir casi instintivamente todo pensamiento peligroso que pueda surgir en la mente.

Vidapropia (ownlife), individualismo y excentricidad.

A destacar que a pesar de su extrema pobreza, la Neolengua era capaz de cobijar el relativismo, como demuestra la palabra negroblanco, capacidad condenable en un disidente pero admirable en un miembro del Partido. Pero, a la vez, la Neolengua daba cobijo al más extremado dogmatismo: evidencia es aquello que el partido haya prescrito, así sea que 2 más 2 son 5. Y era colectivista, condenando por completo la vida propia y el individualismo.

Los tres principales eslóganes del Partido son:

La guerra es la paz.
La libertad es la esclavitud.
La ignorancia es la fuerza.

Orwell (1903-1950) a pesar de ser de izquierdas condenó sin contemplaciones el comunismo, esfuerzo al que dedicó sus dos obras más conocidas 1984 (1949) y rebelión en la granja (1945). Quizás por haberlo conocido de primera mano durante su estancia en Cataluña en plena guerra civil, experiencia que narró en "homenaje a Cataluña" (1938).

Orwell se denominaba socialista, pero socialista demócrata, y no cayó en la tentación de justificar cualquier medio con tal de imponer las ideas de izquierda. Otros muchos intelectuales europeos de izquierda, en cambio, siguieron negando las atrocidades del comunismo y defendiendo a la URSS años después de la muerte de Orwell, a pesar de que era cada vez más obvia la inhumanidad que conlleva el comunismo. Seguramente el fracaso de la URSS se debió a esas características reflejadas en la Neolengua de 1.984: dogmatismo, relativismo y colectivismo.

En ausencia de un régimen totalitario es imposible imponer la Neolengua v1.0. Pero sobre sus tres pilares se lleva décadas construyendo en Occidente una Neolengua posmoderna, que podría denominarse Neolengua v2.0.

martes, julio 04, 2006

Preposiciones

¿Por qué usar sólo dos cuando hay tantas preposiciones para elegir?. Seamos creativos.

España, un país....

a la paz
ante la paz
bajo la paz
cabe la paz
con la paz
contra la paz
de la paz
desde la paz
en la paz
entre la paz
hacia la paz
hasta la paz
para la paz
por la paz
según la paz
sin la paz
so la paz
sobre la paz
tras la paz
(las clásicas, incluyendo cabe y so, hoy en desuso)

durante la paz
mediante la paz
(incorporaciones recientes de 1992 y 1984 respectivamente, que se estudian los niños actuales tras "tras", valga la redundancia).

pro la paz
vía la paz
(de estas dos no sé con seguridad si se han añadido ya o no a la lista oficial de preposiciones).

excepto la paz
salvo la paz
incluso la paz
más la paz
menos la paz
(en proceso de gramaticalización)

Y eso sin meternos en preposiciones compuestas, formadas por dos preposiciones unidas: a por la paz, por entre la paz, por sobre la paz, de entre la paz, desde entre la paz, para con la paz, tras de la paz, etc..., ni en locuciones prepositivas, que precisan algunos aspectos de espacio, tiempo y modo que las preposiciones existentes matizan mal: acerca de la paz, al lado de la paz, alrededor de la paz, antes de la paz, a pesar de la paz, cerca de la paz, con arreglo a la paz, con objeto de la paz, debajo de la paz, delante de la paz, dentro de la paz, después de la paz, detrás de la paz, encima de la paz, en cuanto a la paz, enfrente de la paz, en orden a la paz, en pos de la paz, en virtud de la paz, frente a la paz, fuera de la paz, gracias a la paz, merced a la paz, junto a la paz, lejos de la paz, por culpa de la paz, respecto a la paz, etc... (Fuentes: wikipedia y wordreferenceforums).

¡Hay que ver lo que se aprende gracias al lirismo de nuestro presidente!.

P.D.: paz.

Zapatero y la Neolengua. Tal para cual.

Zapatero: "La autodeterminación no se negocia porque tal derecho no existe en la Constitución"

En fin. ¿Qué es entonces eso de respetar la decisión de los vascos libremente expresada?. Ah, claro, que será la voluntad libremente expresada pero respetando los cauces legales y la legalidad. Ya me quedo más tranquila. No es que en su discurso Zapatero calculadamente le diera esperanzas a ETA de obtener un precio político. No es que se comprometiera a respetar el derecho de autodeterminación del País vasco, lo que sería obviamente inconstitucional (léase el artículo 2). Es que lo que Zapatero dijo fue.....nada. No significó absolutamente nada. (Usando un símil matemático, si a 5 le restas 5, el resultado es cero. Én todo su "discurso" para anunciar el inicio de negociaciones con ETA, cada frase contradecía a la anterior y a la siguiente. Asunto distinto es que decir "cero" en ese determinado contexto y de ese modo tan confuso tenga sentido: posibilitar que cada cual pueda entender lo que quiera. Sentido sí que tiene, pero no significado).

¿Qué es mejor, que en un tema de esta importancia el presidente de tu país hable Neolengua, o que hable y no diga nada?.

ETA ya ha apostado. Y ha apostado por el idioma español puro y duro. Porque a menudo la explicación más sencilla es la acertada.

Diccionario de la Real Academia de la lengua española. Autodeterminación:
1. f. Decisión de los pobladores de una unidad territorial acerca de su futuro estatuto político.

Por cierto, el derecho de autodeterminación obviamente existe. La ONU alegremente lo reconoció, para posteriormente tener que matizarlo muy mucho, dejando claro que estaba limitado a las situaciones coloniales. En cualquier caso, me parece sospechosa la expresión "no existe". Demasiado énfasis. Con decir que la Constitución española no lo reconoce, bastaría. Al menos, bastaría en un país más "normal" que el nuestro. Me gustaría resaltar un párrafo de le entrada de wikipedia:
No se aceptaba, al menos como una figura jurídica del derecho internacional
público, que este derecho se tradujese en un derecho a la secesión de
pueblos o
territorios que no se encontrasen bajo la administración de
potencias
coloniales, y por tanto reconocidos como colonias. El
reconocimiento de una
hipotética secesión sería una responsabilidad
exclusiva del estado aceptado, sin
que Naciones Unidas se inmiscuyese en
los
asuntos, considerados internos, de tal
estado.
(Curiosamente esta misma expresión de asunto interno español es la que usó Sarkozy respecto al proceso de "paz".)

El que el País vasco vea o no reconocido su "derecho" a la autodeterminación depende pues del gobierno español. Vamos, que si el gobierno español acepta que España se convierta en un conjunto de estados cada vez menos asociados, ni la ONU ni Francia moverán un dedo por impedirlo. Menos mal que Zapatero ha dejado claro que NO respetará cualquier decisión del pueblo vasco (por libremente expresada que esté) acerca de un nuevo pacto de convivencia. ¿O no?. ¿O sí?. Necesitamos urgentemente traductores neolengua-español. Con lo sencillo que sería respetar la soberanía nacional española, ese concepto que nunca oiréis nombrar a Zapatero, y convocar un referéndum en el que todos los ciudadanos españoles pudiéramos decidir qué pacto de convivencia deseamos. Como en Italia, sin ir más lejos.

Por cierto, los resultados del referéndum italiano fueron contrarios a descentralizar el Estado cediendo competencias en sanidad, educación, orden público y ciertos tributos a las regiones. Participación: 53,6%, no 61,7%, sí 38,3%. El sí sólo ganó en las regiones norteñas (Lombardía y Véneto) donde existe un mayor deseo de "autogobierno", y ni siquiera en sus capitales. Umberto Bossi, lider de la Liga Norte, habla de acudir a la ONU para ver reconocido su derecho a la autodeterminación. El paralelismo con España es innegable. Sólo que aquí estamos ya mucho más descentralizados de lo que habría pasado a estarlo Italia de haber ganado el sí. Y, sí, el comienzo de esa descentralización española se votó en referéndum en 1.978, pero se votó en bloque dentro de una Constitución democrática y liberal tras una dictadura de casi 40 años. Vamos, que es probable que una Constitución más centralista (parecida a la italiana o la francesa) también hubiera sido votada favorablemente. Se me dirá que quizás no habría sido votada mayoritariamente a favor en Cataluña y País Vasco. Bueno, eso es especular, y además en Italia ha ganado el sí a la descentralización en dos regiones, ¿y qué?. Se hará lo que ha votado mayoritariamente el conjunto de la ciudadanía. Y no se acabará el mundo. Eso es lo que se llama soberanía nacional, que en una democracia liberal equivale a "autodeterminación", ya que los ciudadanos ejercen la autodeterminación al acudir a votar, como pasó en Italia este fin de semana. Sólo que autodeterminación de toda Italia y no sólo de Lombardía o Véneto. Claro, que tenemos un presidente para el que el concepto "nación" es discutido y discutible. Y para respetar y hacer respetar eso de la soberanía nacional ayuda mucho estar convencido de que el país que gobiernas es una nación.

Desde 1.978 hasta ahora España no ha hecho más que descentralizarse más y más. Se han cedido competencias en educación y orden público a regiones donde gobiernan nacionalistas. La inspección central del Estado apenas actúa respecto a qué historia se enseña en ellas, o a si se respetan los derechos lingüísticos de los ciudadanos que desean educación con el español como lengua vehicular. Y, ¡qué curioso!, tanta transferencia, tanto presupuesto, tanto autogobierno no ha contentado a los nacionalistas (incluída, obviamente la ETA). ¿Será quizás porque, como su propio nombre indica, los nacionalistas lo que quieren es llegar a gobernar una nación, y todo paso hacia ello es una etapa provisional, nunca un estado definitivo y satisfactorio?.

Ciertas regiones italianas demandaban tener más "autogobierno". Hicieron su propuesta. Los ciudadanos italianos han tenido la posibilidad de decidir, eligiendo entre un modelo a la española o mantener su modelo centralizado actual. Se ha respetado la democracia, la soberanía nacional, y la voluntad de los ciudadanos libremente expresada. Ahora Zapatero habla de respetar la voluntad mayoritaria de los vascos libremente expresada. ¿Y qué hará si esa voluntad resulta ser distinta de la del conjunto de los españoles?.

Ah, claro, que para conocer la voluntad mayoritaria de TODOS los españoles habría que hacer un referéndum nacional sobre pactos de convivencia, y no uno catalán o vasco. Y una vez hecho, Zapatero tendría que respetar la decisión tomada por los ciudadanos españoles, lo que es demasiada claridad, solidez y concreción para un hablante habitual de Neolengua.

Dejando claro que Zapatero no es por supuesto el único político aficionado a la neolengua en estos tiempos de encuestas, asesores de imagen y discursos que deben ser lo bastante sencillos como para caber en 59 segundos.

domingo, julio 02, 2006

Sobre la materia y el genio

En el libro XXXV de la Historia Natural, Plinio el viejo (23-79 dC) alaba las virtudes de la pintura griega de la época de Alejandro Magno:

"Solamente con cuatro colores, el melino para los blancos, el sil ático para los amarillos, la sinópica del Ponto para los rojos y el atramento para los negros, Apeles y Nicómaco ejecutaron obras inmortales. Estos pintores eran tan célebres que uno sólo de sus cuadros se adquiría al precio del tesoro de las ciudades. Hoy día que la púrpura se emplea para pintar las murallas y que la India nos envía el limo de sus ríos y la sangre de sus dragones y elefantes, la pintura ya no produce obras maestras. Esto es debido a que se concede valor a la materia y no al genio."

Para quien tenga curiosidad por cómo se conseguían los colores en la pintura antigua, en esta página encontrará un enlace a los 10 libros de arquitectura del ingeniero y arquitecto romano Vitrubio, en el séptimo de los cuales habla de la obtención de los distintos colores. Se puede acceder también a la versión íntegra de la edición en español de Joseph Ortiz, de 1787, que incluye dibujos basados en las descripciones de Vitrubio (los dibujos originales se perdieron).


La última lámina es otra versión del "hombre de Vitrubio" mucho más famosa, la que realizara Leonardo da Vinci siguiendo los estudios del arquitecto acerca de las proporciones corporales, respetando la razón o proporción áurea.

sábado, julio 01, 2006

Matrimonio

A raiz de la legalización de los matrimonios homosexuales los contrarios a la medida apelaron a varias razones para oponerse.

Algunos recurrieron a la moral tradicional de raiz católica, otros a cuestiones lingüísticas (sí a la equiparación pero no a la denominación), y otros dijeron que con sus impuestos no tenía porqué recompensarse a dos señores o dos señoras por el hecho de quererse.

No voy a entrar en cuestiones morales, ni de tradición, ni de denominación. Voy a hablar de los costes y ventajas sociales del matrimonio.

Desde el punto de vista legal, un matrimonio tiene dos vertientes: una de derecho privado y otra de derecho público. Por un lado es un contrato libremente suscrito por dos personas que cumplen los requisitos para poder hacerlo (tener la edad mínima, capacidad mental, no estar casados previamente y, hasta hace poco, ser de distinto sexo). Este contrato "privado" obliga a ambos cónyuges a, por ejemplo, pasar una pensión al cónyuge más "pobre" en caso de divorcio. Si la cosa quedara ahí, nada tendría que decir el Estado, aparte de velar por el cumplimiento del mismo, como en cualquier otro tipo de contrato, y en nada (desde el punto de vista legal o económico, sin entrar en lo moral o tradicional) nos perjudicaría o beneficiaría al resto de ciudadanos.

Pero existe una vertiente "pública", que sí que nos afecta a todos los demás: ventajas fiscales, pensiones de viudedad, etc. Este tipo de ventajas para los casados conllevan las correspondientes desventajas económicas y legales para los no casados. Los beneficios se personalizan en los cónyuges mientras que los costes se socializan, y como siempre que sucede esto, comienzan las quejas. Pero habría que pensar por qué motivo los Estados benefician a la institución del matrimonio.

Podría pensarse que es porque el matrimonio le da consistencia y orden a la sociedad. Bueno, aparte de que este motivo conllevaría que entre todos pagamos por una determinada concepción moral y de la sociedad que no todos tenemos por qué compartir, eso sería antes cuando el matrimonio realmente era para toda la vida. Hoy un matrimonio no necesariamente dura, y de hecho cada vez es más fácil y frecuente divorciarse. Muchas personas se casan no por aquello de quererse toda la vida en lo bueno y en lo malo, sino por las ventajas económicas. Y si no sale bien, se divorcian y a otra cosa. Mientras han estado beneficiándose de ventajas que los solteros no disfrutan.

El cristianismo ha hecho mucho hincapié en prohibir el sexo fuera del matrimonio y santificar el matrimonio, pero ya antes de que se convirtiera en la religión oficial del imperio romano el matrimonio era una institución jurídica protegida. De hecho, ha existido en prácticamente todas las culturas de la historia, antes del cristianismo y mucho antes del Estado del Bienestar. Debe de existir una razón universal para ello, y la hay: dentro del matrimonio nacían hijos, que además eran los legítimos, y que eran los únicos de los cuáles el padre podía tener una relativa seguridad de que eran suyos.

Antes de los métodos anticonceptivos fiables, en el matrimonio era muy probable que nacieran hijos.

Antes de los análisis de ADN, el matrimonio era el mejor método para que un hombre pudiera tener algún tipo de control sobre de quién eran los hijos que su mujer traía al mundo. El marido tenía la patria potestas sobre el hijo, y los hijos legítimos tenían derecho a ser mantenidos por ese hombre, y a recibir su herencia (derechos que no tenían los hijos bastardos).

Antes del siglo XX, solía ser el hombre el que trabajaba y la mujer era ama de casa, o bien accedía a trabajos muy mal remunerados. Un hijo nacido fuera del matrimonio con gran probabilidad acabaría dependiendo de la caridad, y sin posibilidades de salir de ese círculo de pobreza (además de no tener consideración social).

Los hombres siguen sin poder parir, pero pueden adoptar o tener hijos y criarlos. Y, obviamente, una mujer lesbiana puede tener hijos (o adoptarlos). Es decir, una pareja homosexual puede que de un modo u otro acabe criando niños.

Básicamente era por su inseparable relación con la natalidad por lo que los legisladores a lo largo de la Historia han beneficiado al matrimonio. La sociedad beneficiaba a los matrimonios por motivos morales, pero también como "inversión" en hijos que garantizaran el futuro de esa sociedad. Y la natalidad sigue siendo fundamental para la supervivencia de estas sociedades nuestras tan modernas, pero hoy seguimos legislando con reglas del siglo XIX una realidad social del XXI, y pagando a personas sólo por quererse, cuando las tasas de natalidad en España son bajísimas. ¿Por qué no redireccionar esas ventajas y ayudas desde el matrimonio hacia la natalidad?. ¿Por qué no "reducir" el matrimonio hacia un contrato privado que además tenga un fuerte significado moral para quien así lo elija casándose por la Iglesia?.

P.D.: es obvio que las propias condiciones legales para contraer matrimonio (incluso aunque fuera únicamente un contrato privado) denotan nuestro sustrato cultural romanocristiano, ya que hasta hace poco prohibían el matrimonio homosexual y de momento siguen prohibiendo la poligamia. Una sociedad no se construye de la nada y a veces pecamos de adanismo. El Islam permite la poligamia pero no la poliandria. ¿Por qué no permitir la poligamia, la poliandria, el matrimonio entre un padre y su hija, etc?. Siempre ha habido y habrá condiciones para casarse, y ni siquiera los "progresistas" son partidarios de eliminarlas todas, aunque critiquen la resistencia de la Iglesia a que se eliminara la de que ambos cónyuges sean de distinto sexo. Me pregunto qué razones esgrimirá el "progresismo" para no legalizar la poligamia.

P.D. 2: admiro profundamente a las personas que realmente se casan "para toda la vida, en lo bueno y en lo malo, en la salud y en la enfermedad". No tengo nada en contra del matrimonio, más bien al contrario, simplemente me pregunto por qué todos debemos beneficiar económicamente a matrimonios sin hijos. Y sé que es un tema muy complejo.

P.D. 3: por aquello de la igualdad en derechos y deberes soy partidaria de que las uniones entre homosexuales tengan idéntica consideración legal que las heterosexuales. Sin entrar en denominaciones.